Respecto a la Violencia conta las mujeres, el TEMA JUDICIAL tampoco ayuda mucho:
1. 55% de las denuncias son archivadas sin más trámite.
2. Del 45% de las denuncias que van a juicio:
• El 70% tienen condena.
• Del 30% de las denuncias: el sistema permite acuerdo entre las partes si el denunciado se declara culpable.
Así que acabamos con que, de cada 100 denuncias, no terminan ni 20 en condena.
Existen 80.000 maltratadores con sentencia judicial que deambulan por nuestras calles y la administración no tiene recursos para su control y para la protección de las víctimas. NECESITAMOS MÁS RECURSOS.
Otro mito es el de las denuncias falsas: hay un convencimiento social de que hay denuncias falsas para sacar ventaja en los procesos de divorcio. Esta campaña ha sido muy eficaz para archivar denuncias, perseguir a todas las mujeres de las que se sospeche y ralentizar todos los procesos. En realidad, el T.S ha asegurado que el porcentaje de denuncias falsas son una mínima expresión del total. Pero ha alimentado a los sectores machistas de la judicatura, forenses, sicólogos... a la hora de emitir informes y sentencias.
La Ley de Violencia de Género no protege a todas las mujeres: es necesario cambiar la carga de la prueba, que ahora pesa sobre la mujer, que es quién tiene que demostrarlo TODO.
Las leyes no son neutras ni neutrales, el acento se pone en la honestidad. La desconfienza de las mujeres hacia el derecho y el sistema judicial se explica porque siempre ha actuado como agente tutelador, PROHIBIENDO.
La Ley Integral de la Violencia de Género es una imperfecta herramienta de 5 años de evolución que, en gran medida, vió la luz gracias al movimiento asociativo de mujeres, que demándó durante mucho tiempo y de manera incansable una medida legal que visibilizase un problema que existía desde hace 6.000 años.
Hoy, en Noviembre del 2010,
las mujeres continuamos
esperando TODO del derecho
No hay comentarios:
Publicar un comentario