Estos
días, debido a las informaciones que nos llegan, somos conscientes
del problema que sufren las mujeres porteadoras.
Aplastada
por cientos de personas, en una enorme avalancha producida en el
puente de acceso a Ceuta desde Marruecos, acaba de morir una de
ellas.
Las
porteadoras son mujeres marroquíes que se desplazan, entre las zonas
fronterizas de Marruecos y Ceuta, para transportar a sus espaldas
mercancías que compran en polígonos comerciales de Ceuta, para
luego venderlas en Marruecos.
Las
condiciones de trabajo son denigrantes. Llevan entre 60 y 90 kilos de
peso a sus espaldas, durante horas, por un salario de menos de diez
euros de media al día.
La
Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía lleva años
denunciando que más de siete mil mujeres se ven sometidas, a diario,
a vejaciones, abusos e incluso acosos sexuales, por parte de los
cuerpos policiales, a ambos lados de la frontera.
Estas
mujeres, cuya edad oscila entre los 35 y los 60 años, tienen
jornadas laborales restringidas, debido a los horarios de apertura y
cierre de los pasos fronterizos.
Las
principales violaciones de derechos humanos se producen en el acceso
y en la salida de Ceuta.
Todo
ello ante la mirada impasible de las autoridades sociopolíticas,
tanto de uno como de otro país.
Desde
ENclave, nunca nos cansaremos de pedir respeto y dignidad para las
mujeres y, especialmente en este caso, para las porteadoras
marroquíes.
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