El Puerto Viejo
El
Puerto Viejo surgió en el s.XVIII como un pueblo de pescadores y, ya
en el s.XIX,se extendió ladera arriba, dando lugar a un barrio
algorteño.
El
paso del tiempo no ha impedido que conserve todo su encanto, con sus
casas desordenadas, de colores alegres y sus estrechas callejuelas.
A su patrono, San Nicolás de Bari, queremos recordar y, siguiendo sus huellas, nos llevan delante de la ermita que fue dedicada en su honor.
La ermita fue fundada en el año 1634 aunque, en el siglo XIX quedó clausurada y llegó a ser Escuela Náutica.
La reforma llevada a cabo en 1948 terminó por convertirla en casa de vecinos. Hoy en día la identificamos por la hornacina de la Virgen que preside su fachada.
Y
si nos vamos de fiesta, el Puerto Viejo honra a su patrón con cultos
y festejos diversos, en una romería durante los días 11, 12 y 13 de
agosto.
Desde
ENclave animamos a dejar “aparcadas” las muchas preocupaciones
diarias que nos afectan y a disfrutar de unas fiestas en igualdad y sin agresiones sexistas recordando que cuando una mujer dice
NO es NO
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